TESTIMONIOS
Haruna Garba
Versión corta (3 min.)
«Xabec es amor y bienestar; allí vi el amor que yo quería»
Ser huérfano en África conlleva grandes dificultades, y Haruna Garba lo sabe por propia experiencia. Tras la muerte de su padre, su vida en Togo era muy difícil, lo que le llevó a tomar la dura decisión de abandonar su país. «Salir no fue fácil, fue un viaje largo y complicado», recuerda Haruna.
Su travesía comenzó a los 12 años, enfrentando un camino solitario que lo llevó a atravesar Mauritania, Argelia y, finalmente, llegar a Canarias. Cada etapa del viaje le mostró las duras realidades de la vida, especialmente en el desierto, donde vivió experiencias que lo marcaron profundamente.
Al llegar a Valencia, Garba sintió un profundo alivio y gratitud, exclamando «Gracias a Dios, estoy en casa». En España, encontró en Xabec un refugio y un lugar de transformación. «Xabec es amor y bienestar; allí vi el amor que yo quería», comenta. El centro de formación profesional, que comenzó humilde, creció hasta albergar a 1.500 alumnos, ofreciendo mucho más que educación.
Después de encontrar estabilidad y amor en España, Garba se casó y formó una familia. Sin embargo, su objetivo siempre ha sido poder ayudar a más niños huérfanos en su país de origen. “No quiero que otros niños tengan que arriesgar sus vidas para llegar a España”. Motivado por su propia experiencia, Garba ha trabajado para mejorar sus condiciones.
El año pasado, con gran esfuerzo, construyeron un colegio en Togo y ahora, 27 niños huérfanos tienen un lugar seguro donde desayunan, comen y cenan. “Para mí ha sido lo mejor, empezar desde cero, al igual que Xabec en sus inicios”, afirma Garba. Este año su objetivo es expandir el proyecto y comenzar formación profesional, con el objetivo de establecer más colegios en varios países africanos y ofrecer a los niños nuevas oportunidades.
Garba expresa su profunda gratitud hacia Luis Valls, a quien no ha conocido personalmente, pero cuya contribución a Xabec ha sido crucial. “Gracias a Luis Valls, Xabec es uno de los mejores colegios del mundo”, concluye.